San Nicola Arcella se asoma a uno de los tramos más espectaculares de la Riviera de los Cedros, caracterizado por acantilados que caen al mar, calas ocultas y aguas cristalinas de colores cambiantes. Este pintoresco pueblo conserva un casco antiguo fascinante, con callejuelas estrechas, plazas panorámicas y antiguas casas de piedra que cuentan historias de pescadores y viajeros.
Entre los lugares emblemáticos de la región destaca el Arcomagno, una bahía natural rodeada de altas paredes rocosas que se abre a una pequeña playa de arena, accesible solo a pie o por mar. No menos impresionante es la Gruta del León, una cueva marina que recibe su nombre por su forma particular, perfecta para excursiones en barco o en kayak.
San Nicola Arcella también es un punto de partida para descubrir las maravillas del Parque Nacional del Pollino y para visitar los pueblos de la Riviera de los Cedros, ricos en historia, tradiciones y rutas gastronómicas. En los alrededores no faltan actividades para los amantes del deporte y la aventura, como senderismo panorámico, buceo, snorkel y paseos en barco a lo largo de la costa.
La zona, famosa por su clima templado y la hospitalidad típicamente calabresa, ofrece la oportunidad de disfrutar de unas vacaciones que combinan mar, naturaleza, cultura y sabores auténticos, entre huertos de cítricos, plantaciones de cedros y una cocina local con carácter decidido y genuino.
*Distancias a vista de pájaro