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La zona donde se encuentra el Relais San Baio es un rincón auténtico de la costa toscana, situada entre las suaves colinas de Bibbona y el mar cristalino de Marina di Cecina. Un paisaje que alterna viñedos ordenados, olivos centenarios y bosques fragantes de matorral mediterráneo, con caminos que serpentean entre pueblos medievales, bodegas prestigiosas y vistas abiertas hacia el horizonte.
A pocos minutos en coche se puede llegar a Bolgheri, famoso por sus renombrados vinos y por el pintoresco camino de cipreses inmortalizado en los versos de Carducci. Aquí, la atmósfera se ha mantenido intacta con el tiempo: tiendas, vinotecas y pequeños restaurantes narran una Toscana auténtica, llena de tradición, cultura rural y una cálida hospitalidad.
Los amantes de la naturaleza pueden explorar la cercana Reserva Natural de los Tomboli de Cecina, un ecosistema único que se extiende por kilómetros a lo largo de la costa, entre dunas de arena y densos pinares que ofrecen sombra y frescura incluso en los días más calurosos. Los senderos que atraviesan la reserva son ideales para caminatas, correr, hacer nordic walking o simplemente disfrutar de momentos de relajación en contacto con la naturaleza.
El mar, de fácil acceso, cuenta con establecimientos bien equipados y tramos de playa libre, con aguas limpias y fondos arenosos. Desde aquí también parten excursiones al Santuario de los Cetáceos, una de las áreas marinas más ricas del Mediterráneo, donde es posible avistar delfines, ballenas y cachalotes en su hábitat natural.
El territorio es perfecto para quienes desean combinar relajación y descubrimiento. En poco tiempo se pueden alcanzar algunas de las ciudades de arte más icónicas de Italia, como Florencia, Pisa, Lucca y Siena, o perderse entre las calles de Volterra, Castagneto Carducci o Populonia, cada una con su propio patrimonio histórico y cultural.
Esta región también es un destino privilegiado para el turismo gastronómico: las colinas alrededor de Bibbona y Bolgheri albergan algunas de las bodegas más prestigiosas del mundo, donde se pueden degustar vinos de excelencia combinados con los sabores de la cocina local. Aceite, quesos, embutidos y pan horneado son solo algunas de las especialidades para disfrutar en agroturismos y trattorias enclavadas en el paisaje.
Una estancia en esta parte de la Toscana ofrece experiencias auténticas, llenas de belleza, silencio, sabores intensos y una profunda conexión con el territorio.
*Distancias a vista de pájaro