Casa Dolci Marche

¡Hola, soy Dino

El encargado de Casa Dolci Marche es Dino, un geólogo de profesión y guía naturalista desde hace más de diez años. Apasionado por la naturaleza y por los ritmos pausados de la vida rural, decidió reabrir esta casa familiar para recibir a quienes deseen descubrir la autenticidad de las Marcas. Junto a su esposa Maria Assunta, con quien comparte el amor por la música y el teatro, se dedica con esmero a cuidar de los huéspedes, ofreciendo una acogida cálida y discreta. Sin hijos, mima a sus nietos y recibe a los viajeros con el mismo espíritu familiar, convirtiendo cada estancia en una oportunidad de encuentro y genuina convivencia.

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Zona Campagna

La Valdaso es uno de los valles más encantadores de las Marcas, un territorio situado entre el Adriático y los Apeninos que mantiene intacta el alma rural de la región. A lo largo del río Aso, este valle se extiende entre suaves colinas cultivadas, pequeños pueblos históricos y una naturaleza exuberante que varía con cada estación. Aquí, el paisaje está marcado por hileras de viñas, campos de trigo, huertos y viveros que dan color a los campos, convirtiéndola en una de las zonas más fértiles y productivas de las Marcas.

Los pueblos que salpican las elevaciones de la Valdaso —como Montelparo, Petritoli, Ortezzano, Monterinaldo y Montalto delle Marche— son verdaderos tesoros de historia y belleza, con sus murallas medievales, plazas de ladrillo, campanarios e iglesias ricas en arte sacro. Pasear por sus callejuelas es como retroceder en el tiempo, sumergiéndose en una atmósfera auténtica y poco afectada por el turismo masivo. A lo largo del año, ferias y festividades tradicionales animan los centros con música, sabores y recreaciones históricas.

A menos de media hora en coche se encuentra la costa adriática, con las playas de Pedaso, Cupra Marittima y Porto San Giorgio, perfectas para un día de playa entre establecimientos bien equipados y tramos de litoral más salvajes. La costa picena también ofrece hermosos paseos junto al mar y restaurantes donde disfrutar de pescado fresco y especialidades locales.

Hacia el interior, el paisaje asciende suavemente hacia los Montes Sibillini, lo que hace que la zona sea ideal para excursiones, caminatas por los bosques, recorridos en bicicleta y visitas a parques naturales. La proximidad entre el mar y la montaña es una de las características más valoradas de esta parte de las Marcas, permitiendo en pocas decenas de kilómetros pasar de un baño al atardecer a una caminata entre los pastos de altura.

La Valdaso es también un destino gastronómico de excelencia: desde frutas típicas como duraznos y manzanas hasta aceitunas de Ascoli, desde los quesos de las áreas interiores hasta el vino cocido y la vernaccia, cada producto cuenta un fragmento de historia y tradición agrícola. Las bodegas y agroturismos de la zona ofrecen degustaciones y momentos de convivencia que enriquecen el viaje con sabores y encuentros sinceros.

Quien decide quedarse en Valdaso encuentra un equilibrio raro entre la belleza paisajística, el patrimonio histórico y la calidad de vida, en un rincón de las Marcas que aún sorprende por su autenticidad y hospitalidad.