Información varios
Características de la casa
Sistemas de aire acondicionado y calefacción de la casa
Sistema electrico
Servicios de la casa
Instalaciones y servicios
Número de habitaciones
Tamaño de las habitaciones
Cuarto de baño
Instalaciones de la habitación
Mobiliario
Servicios de limpieza
Servicios
Holiday themes - the place
Temas de viaje - tipo de población
Temas de viaje - características de la zona
Temas de viaje - características de casa
La zona donde se encuentra La Portazza es uno de los rincones más encantadores de la Sicilia occidental, un territorio que combina historia milenaria, naturaleza prístina y atmósferas genuinas. A pocos minutos del centro histórico de Marsala, la antigua Lilibeo fundada por los cartagineses, la villa tiene vistas a la Laguna dello Stagnone, un área protegida desde 1984 como Reserva Natural Orientada. Aquí, las aguas poco profundas y salinas, las islas tranquilas y los molinos de viento crean un paisaje suspendido en el tiempo, donde los colores del atardecer se reflejan en las salinas que parecen espejos de plata y ámbar.
La Reserva alberga un ecosistema extremadamente rico y frágil: es el hábitat ideal para numerosas especies de aves migratorias, incluidos flamencos, garzas y cormoranes, que habitan estos cuerpos de agua durante sus rutas entre Europa y África. La vegetación, compuesta por especies típicamente mediterráneas como la caléndula de mar, completa un paisaje que invita al silencio y a la observación.
En el corazón de la laguna se encuentra Mothia, la antigua colonia fenicia, accesible en pocos minutos en una pequeña embarcación. Es uno de los sitios arqueológicos más fascinantes de la isla, con mosaicos, necrópolis y el célebre Tophet, un santuario dedicado a las deidades fenicias. El Museo Whitaker conserva los principales hallazgos encontrados en la isla, que atestiguan la importancia histórica y cultural de este pequeño pedazo de tierra.
A solo unos kilómetros se extiende la costa marsalense, donde se alternan chiringuitos bien equipados y tramos de playa virgen, con aguas cristalinas y fondos bajos, ideales incluso para familias. Los amantes de los deportes acuáticos encuentran en el Stagnone uno de los lugares más famosos del mundo para practicar kitesurf, gracias a los vientos constantes y a la particular morfología de la laguna.
La ubicación de la propiedad permite acceder fácilmente a algunos de los destinos más emblemáticos de Sicilia: Segesta y Selinunte, con sus templos dóricos inmersos en el campo; Erice, un pueblo medieval suspendido entre el cielo y el mar; el Valle de los Templos de Agrigento, patrimonio de la humanidad; la Reserva del Zingaro, con sus senderos panorámicos y calas vírgenes. Las islas Egadi, con Favignana, Levanzo y Marettimo, también están muy cerca, accesibles en ferry o hidroala desde el puerto cercano.
Por lo tanto, la zona ofrece un equilibrio perfecto entre bellezas naturales, riqueza cultural, experiencias auténticas y oportunidades de relajación, haciendo que cada estancia sea una inmersión completa en la Sicilia más auténtica.
*Distancias a vista de pájaro