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La zona donde se encuentra Les Ecureuils, en Saint-Pierre, a 1500 metros de altitud, representa un equilibrio perfecto entre la tranquilidad alpina y la accesibilidad. A pesar de su ubicación elevada, está bien conectada: solo se necesitan treinta minutos en coche para llegar a Aosta, y en menos de una hora se puede alcanzar las famosas valles del Parque Nacional del Gran Paradiso y Courmayeur, al pie del Monte Blanco. Esto la convierte en una base ideal tanto para quienes desean explorar las bellezas naturales de la Alta Valle, como para aquellos que se dirigen hacia la Media Valle.
El paisaje que rodea el agroturismo es el típico de los Alpes valdostanos: bosques, praderas, cumbres majestuosas y pequeños pueblos de piedra esparcidos entre las laderas. Las oportunidades de excursión son numerosas y aptas para diferentes niveles de experiencia. Entre los destinos más populares se encuentra el Mont Fallère, una cumbre panorámica de 3061 metros, accesible a pie desde el agroturismo, con la opción de detenerse en el Rifugio Fallère, a 2385 metros. También los cercanos pueblos de Vetan, Vens y Saint-Nicolas son fácilmente alcanzables a pie, con rutas que atraviesan paisajes encantadores y silenciosos.
Les Ecureuils también está ubicado a lo largo de la etapa n. 12 del Cammino Balteo, un itinerario de senderismo circular que pasa por aldeas, castillos, viñedos y entornos naturales de gran belleza, ofreciendo en cada paso vistas espectaculares del valle.
El aire es puro, el silencio se interrumpe solo por los sonidos de la naturaleza, y la vista se extiende libremente sobre los valles del Parque del Gran Paradiso. Un lugar ideal para desacelerar, respirar profundamente y reconectarse con la auténtica montaña.
*Distancias a vista de pájaro
