B&B Villa Margherita

La Villa Margherita es una auténtica residencia histórica situada en uno de los tramos más fascinantes del Lago Maggiore, en la franja de villas, jardines y parques históricos que caracterizan la costa piemontesa cerca del golfo de Lesa. Construida a principios del siglo XX por la familia Cabella de Génova y acogiendo viajeros desde 1952, la villa hoy en día se presenta como un refugio encantador para quienes desean sumergirse en la belleza y tranquilidad del paisaje lacustre, protegido por una normativa específica por su valor paisajístico.

Rodeada de árboles centenarios, ofrece un oasis de silencio y verdor a pocos minutos de la playa pública de la Madonna di Campagna, que cuenta con ducha, así como de una piscina y canchas de tenis de fácil acceso. Las habitaciones, amplias y decoradas con muebles originales de la villa, conservan el carácter elegante del lugar, con baño privado recientemente renovado, ducha y Wi-Fi. La amplia terraza de la habitación, orientada al oeste, ofrece vistas relajantes perfectas para disfrutar del atardecer. En consonancia con la atmósfera serena de la residencia, las habitaciones no cuentan con televisión.

Los huéspedes pueden relajarse en la veranda, diseñada para la lectura, la conversación o una merienda, o tocar el piano ubicado en la sala del piso bajo. El desayuno se sirve en el jardín durante la temporada agradable o en la veranda en los días más frescos.

Lesa, a pocos pasos, es un encantador pueblo donde se pueden encontrar pequeños restaurantes, bistrós y pizzerías. Desde allí, es sencillo partir a explorar las Islas Borromeas, Villa Taranto, la Isla Madre o el jardín botánico Alpinia en Gignese, gracias a los trenes, barcos y autobuses disponibles. Para una cena romántica, es posible reservar una mesa en el restaurante “La Peschiera” en la Isla de los Pescadores, accesible en lancha desde Stresa, con un descuento especial para los huéspedes de la villa.

Gestionada por la familia Visentini desde 1959, hoy la villa es cuidada con pasión por Raffaelo, junto a su hermano Alfredo y su esposa Tina, quienes preservan el espíritu original y la autenticidad de los muebles con la misma atención y dedicación que comenzaron Margherita y Giovanni en el periodo de posguerra. Una estancia en la Villa Margherita es una experiencia auténtica, llena de historia, naturaleza y una cálida hospitalidad.