Agriturismo Campo Rosso

En el corazón de las colinas romañolas, entre bosques, prados y antiguos senderos, se encuentra el Agriturismo Campo Rosso, una granja biológica, una finca educativa y un refugio para quienes desean reconectarse con la naturaleza. A pocos minutos de Civitella di Romagna, el lugar recibe a los visitantes en un entorno rural auténtico, donde la hospitalidad se entrelaza con el respeto por la tierra, las tradiciones campesinas y la cultura gastronómica local.

La antigua casa principal, cuidadosamente restaurada, alberga habitaciones acogedoras, cada una con su propia personalidad, decoradas con detalles artísticos y con vistas a las colinas circundantes. Las áreas comunes incluyen un salón restaurante interior, una veranda panorámica ideal para eventos y un amplio y funcional patio, perfecto para aquellos que viajan en vehículos propios o autocaravanas.

Campo Rosso es un mundo por descubrir: desde clases de equitación natural para adultos y niños hasta rutas de acercamiento al caballo y al burro, desde las actividades de la granja educativa hasta talleres de cocina con hierbas silvestres, pan, piadina o menús de kilómetro cero. Se organizan eventos temáticos, experiencias sensoriales vinculadas a la comida y la estacionalidad, actividades de team building e incluso despedidas de soltero y soltera con un toque rural.

Todo esto es guiado por Katia Sandri, agrichef, sommelier, guía ecuestre y apasionada anfitriona, quien ha convertido un sueño de retorno a las raíces en una realidad concreta y dinámica. Con un pasado en el sector hotelero y una formación universitaria, ha sabido entrelazar estudios, experiencias y pasiones en un proyecto coherente e inspirador, donde nada se deja al azar, ni siquiera el desayuno.

La cocina del agriturismo resalta cada ingrediente: harinas biológicas de granos antiguos, huevos frescos de gallinas libres, conservas caseras, verduras cosechadas de su propio huerto, hierbas silvestres, quesos y embutidos de pequeños productores locales, así como vinos y cervezas artesanales de las colinas romañolas. Cada plato cuenta la historia de un territorio rico en sabores, personas y cultura.

Quien busque un lugar auténtico donde el tiempo fluya al ritmo de las estaciones encontrará aquí una experiencia de estancia que va más allá de un simple alojamiento, capaz de ofrecer emociones sencillas y profundas, en el silencio del campo y en la voz apasionada de quienes lo habitan cada día.